"Tarta de Kéfir y Fruta"

"Polos de Plátano, Galleta y Chocolate"

No podía creer lo que estaba viendo; había cerrado los ojos tan solo unos minutos. Media docena de cabras, lo miraban mientras mordisqueaban las hierbas. Se levantó despacio, y se desperezó, bostezando. Giró la cabeza, primero a la derecha, después ala izquierda, y no avistó a las demás. El sonido distante, de los cencerros, se confundía con el de la mar. Estaba en apuros. Con el corazón dando saltos, corrió hasta el acantilado, mirando entre la vegetación.

Se acercó al borde y miró. Los bañistas caminaban entre las rocas, aprovechando la marea baja, para coger percebes. Volvió sobre sus pasos y pasó al lado de lo que quedaba del rebaño. Se dirigió hacia la verja y vio que estaba cerrada. Seguía sin entender que pasara. Camino a lo largo del muro y se deparó con algunas con algunas piedras que habían caído, abriendo una brecha. Tomó impulso y saltó para el otro lado. Miró hacía la sierra y algo le dijo que siguiera en aquella dirección. Aquella mañana, viera como algunas cabras se paraban en el camino para comer. Los balidos se escuchaban con mayor intensidad. Se sintió más tranquilo y aminoró el paso. Atravesó la vegetación y las encontró debajo de un árbol; unas tumbadas en el suelo, otras comiendo unos frutos de un rojo anaranjado. Meneó la cola y ladró, loco de alegría.

"Tarta de Requesón"

Nivel de dificultad:

Muy fácil

Tiempo de elaboración:

60 min.

 

Ingredientes:

2 requesones, aproximadamente 500g.

5 huevos grandes

250g. de azúcar

100g. de harina

50g. de mantequilla sin sal

Ralladura de limón

Opcional, frutos rojos.

 

Preparación:

Caliente el horno a 200º. Cubra la base de un molde desmontable con papel vegetal y engrase con mantequilla. Deshaga el requesón con un tenedor o si prefiere una textura más suave triture en el procesador. Bata los huevos con el azúcar. Añada la harina tamizada, el requesón, la mantequilla derretida y la ralladura de limón.

Coloque en el molde y hornee de veinte a treinta minutos, o hasta que solidifique. Retire del horno y deje enfriando sobre una rejilla antes de desmoldar.

Sirva acompañado de frutos rojos.

Flores secas, flores frescas...

Estaba despierto cuando sonó el despertador. Había pasado la noche dando vueltas en la cama. Desde que ella se marchara no lograba dormir una noche entera. Miró a través la ventana y se quedó viendo cómo el cielo cambiaba de color. Nubes que pasaban de tonos rosa suave a un azul violáceo. A lo lejos, los montes surgían como islas en un mar de espuma. Acarició al gato que se había subido a la cama, echó la ropa hacia atrás y se levantó. El animal lo seguía con la mirada mientras se aseaba y se vestía. Corría delante y se rozaba en sus piernas pidiendo comida mientras ponía la tetera en el fuego. Dirigió la mirada al calendario de pared y alargó el brazo para arrancar la página, 13 de febrero. Miró el fregadero lleno y después el reloj, no tenía tiempo para limpiar. Dio un sorbo en el té y cogió la caja con la tarta de chocolate y frutos rojos, a ella le encantaba. Sacudió las flores para escurrir el agua de los tallos y salió de casa dando un portazo. La ciudad  había despertado. Gente que corría para coger el autobús, estudiantes con mochila que caminaban tranquilamente como si tuvieran todo el tiempo del  mundo, coches parados en el semáforo y otros que pitaban tan pronto cambiaba de color… Se refugió en la parada, podía haberse sentado, pero estaba demasiado ansioso. Durante el trayecto ensayaba mentalmente el discurso, iba a verla. Subió la calle caminando al lado del muro  alto hasta llegar a un portal de hierro. Fuera, un estanco de flores y personas que se paraban para preguntar precios o comprar un ramo. Respiró hondo y avanzó. Caminó por una calle estrecha, rodeada de árboles y construcciones de mármol en los más diversos estilos, desde el neogótico al “Art Noveau” homenaje de familiares que habían dejado de ir hacía mucho. Giró a la izquierda y siguió caminando por calles, cada vez más estrechas, hasta llegar a una zona prácticamente desnuda donde algunas personas se movían en silencio limpiando y sustituyendo flores secas por otras frescas. Se paró, en silencio, delante de la tumba. La losa de mármol se destacaba del suelo unos pocos centímetro, y tan solo tenía grabado un nombre y una fecha. Al lado, una placa de hierro clavada en el suelo, el único elemento decorativo que no había podido remover. Dejó la caja y las flores, se arrodilló y con un pañuelo sacudió el polvo que se había acumulado con las lluvias de los últimos días. Del ramo cogió una rosa blanca que depositó sobre la inscripción. Mientras murmuraba una despedida limpió una lágrima que caía de sus ojos. Se incorporó y recogió las cosas llegada la hora. Caminó apresurado sin volver la mirada, cruzó el portal y salió. Fuera, al otro lado de la calle, esperaba una mujer.

"Bizcocho de Chocolate y Frutos Rojos"

Nivel de dificultad:

Medio

Tiempo de elaboración:

120 min.

 

Ingredientes:

250g de azúcar

300g de harina con levadura

7 huevos grandes

150g de cacao puro

200ml de aceite vegetal

250ml de agua hirviendo

200g de nata para montar

3 c/sopa de azúcar, bien llenas

1 tableta de chocolate negro 70% cacao (200g)

1 c/s de mantequilla sin sal

1 café solo

200g de frambuesas

Arándanos para decorar

Preparación:

Caliente el horno a 200º. Coloque todos los ingredientes a excepción del agua en un bol y mezcle hasta que se forme una pasta. Añada el agua hirviendo poco a poco sin dejar de batir. Cuando se hayan integrado todos los ingredientes coloque en un molde engrasado y hornee veinte minutos o bien hasta que al hacer el test del palillo este salga limpio. Deje enfriar sobre una rejilla antes de desmoldar. Monte la nata, (puede ver la receta en la tarta de chocolate y menta), y reserve en la nevera. Espere unas horas antes de rellenar el bizcocho. Corte la parte superior, aproximadamente dos centímetros por debajo del borde. Retírela con cuidado para que no se rompa. Con un cuchillo corte el interior del bizcocho, dejando paredes con un grosor que puede variar de uno a dos centímetros. Vacíe con una cuchara. Rellene con una pequeña cantidad de nata y coloque por encima frambuesas. Repita la operación hasta llegar al borde. Coloque la parte superior de la tarta. Derrita el chocolate al baño María, con una cuchara de mantequilla y añada el café. Remueva hasta integrarlo bien. Cubra el bizcocho.

Decore con frambuesas y arándanos.

La mujer de las castañas!

Un paraguas inmenso la protegía del viento. Encima del hornillo, el asador de barro crepitaba, cada vez que lo agitaba o lanzaba un puñado de sal. Las castañas cortadas esperaban su turno en el cajón entreabierto, lado a lado, con las monedas. Las asadas se apilaban en una cesta de mimbre arropadas por un paño sucio.

A cambio de dos pesetas y media veía como rasgaba el periódico con el que hacia un cartucho donde caían las castañas, por entre sus dedos sucios, hasta hacer la docena. A veces, quizás derecho adquirido por cliente fiel, o más bien el remordimiento de la cantidad de castañas podridas, colocaba una más.

La mujer de las castañas, como la conocíamos, ocupaba cada otoño la acera, suya por derecho, en un cruce de caminos, allí mismo, al lado del parque, hasta que un día dejó de aparecer…

"Bizcocho de Castañas e Yema"

Nivel de dificultad

Fácil

Tiempo de elaboración:

50 min.

 

Bizcocho de Castañas

Ingredientes: 

500g de castañas cocidas

6 huevos

200g de azúcar

2 c/té de levadura

½ taza de té de aceite vegetal (100ml.)

1 pizca de sal

Preparación:

Caliente el horno a 180º. Triture las castañas y reserve. Separe las yemas de las claras, reservando estas últimas. Bata las yemas con el azúcar hasta duplicar su tamaño. Añada las castañas y la levadura mezclando bien. Junte el aceite vegetal y siga batiendo hasta obtener una masa uniforme. Junte la sala las claras y monte a punto de nieve. Mezcle con la masa con una varilla de alambre, con movimientos circulares y suaves. Coloque en un molde untado y hornee a 200º, alrededor de veinte a treinta minutos. Cuando esté cocido retire del horno  y deje que se enfríe al menos diez minutos, sobre una rejilla de pastelería, antes de desmoldar.

 

“Yemas”

 Ingredientes:

 8 yemas

8 c/sopa de azúcar

Agua

Preparación:

Coloque el azúcar en un cazo y cubra con agua. Coloque a fuego medio, removiendo de vez en cuando, hasta obtener el punto de perla, cuando al mojar la cuchara y escurrirla se forma una gota de que tarda en caer. Retire del fuego, deje que se enfríe un poco y añada las yemas batidas. Vuelva a llevar al fuego removiendo siempre, hasta obtener la consistencia deseada. Cuidado, porque al enfriarse la crema va a espesar más.

Rellene el bizcocho con las yemas y decore con chocolate fundido.

Nota: en esta receta utilicé castañas congeladas, que cocí  durante diez minutos en agua hirviendo.

"After-Eight"

A mi madre le encantaban los “After-Eight” y casi seguro le haría ilusión este bizcocho donde se mezclan el cacao puro con el delicado aroma de la menta. La nata montada es  el eje de unión realizando sabores. 

"Bizcocho de Chocolate y Menta"

Nivel de dificultad:

Medio

Tiempo de elaboración:

120 min.

 

“Bizcocho de Chocolate y Menta”

Ingredientes  (Bizcocho de Chocolate)

250g de azúcar

300g de harina con levadura

7 huevos grandes

150g de cacao puro

200ml de aceite vegetal

250ml de agua hirviendo

1 molde cuadrado (28cm)

Preparación:

Caliente el horno a 200º. Coloque todos los ingredientes a excepción del agua en un bol y mezcle hasta que se forme una pasta. Añada el agua hirviendo poco a poco sin dejar de batir. Cuando se hayan integrado todos los ingredientes coloque en un molde engrasado y hornee veinte minutos o bien hasta que al hacer el test del palillo este salga limpio. Deje enfriar sobre una rejilla antes de desmoldar.

 

"Bizcocho de Menta"

Ingredientes:

6 huevos tamaño L

225g de azúcar

150g de harina para repostería

¼ c/té de levadura

Una pizca de sal

cinco gotas de aroma de menta

Colorante alimentar verde

1 molde cuadrado (26cm)

Preparación:

Caliente el horno a 180º. Bata las yemas con el azúcar cinco minutos o bien hasta que dupliquen de tamaño. Añada una pizca de sal a las claras y móntelas a punto de nieve. Con  movimientos suaves, utilizando una varilla de alambre, envuelva las claras con la crema. Tamice la harina con la levadura y envuelva suavemente con la masa. Coloque en un molde untado y hornee alrededor de 25 minutos. Retire del horno y deje enfriar sobre una rejilla antes de desmoldar. 

"Nata Montada"

Ingredientes:

500ml de nata para montar

5 a 6 c/sopa de azúcar

Preparación:

Coloque la nata montada en la batidora a velocidad media. Cuando empiece a espesar añada las cucharas colmadas de azúcar, de una y siga batiendo hasta que termine de montar. 

Corte la parte superior del bizcocho de chocolate para obtener una superficie plana. Cubra de nata. Haga un corte longitudinal en el bizcocho de menta para que sobresalga el color verde y coloque sobre la nata con esa parte para arriba.

Nota: decore con chocolates en forma de lápidas y huesos o bien con gominolas. Puede esparcir trocitos de bizcocho de chocolate para que parezca tierra removida.

Tomar

¡Acompañé a mi madre hasta la pastelería “Estrela”, donde me compró un helado! No recuerdo ningún sabor en concreto, tan solo que era un cono de galleta crujiente con una bola. Siguen gustándome los helados y me fascinan aquellas montañas cremosas de distintos colores y sabores.

"Polos de Frambuesa y Yogur"

Grado de dificultad:

Muy fácil

Tiempo de preparación:

20 min

 

8 personas

 

Ingredientes:

600g de yogur griego natural

100g de miel

300g de frambuesas

 

Preparación:

Empezamos haciendo el yogur de frambuesas. En el vaso de la batidora colocamos 400 gramos de yogur, 70g de miel, la fruta y lo trituramos. Mezclamos los 200g de yogur con los 30g de miel que nos han sobrado. Rellenamos los moldes alternando sabores para lograr este efecto marmoleado. Colocamos los palillos y dejamos que se congele entre cuatro a cinco horas.